Festivo, desenfadado y divertido suena el Kazoo, también conocido como mirlitón. Tocarlo no requiere de conocimientos musicales previos, por lo que una vez en tus manos podrás, desde el primer momento, entonar cualquier melodía o canción. Eso sí, soplar no te servirá de nada, para lograr sacar su jovial sonido tan sólo tendrás que tatarear.
El tutorial de Rockandplay Daniel nos ilustra cómo tocarlo.
Originario de África, donde era usado en ceremonias sagradas, la creencia popular apunta a que fue presentado en 1852 en la feria del estado americano de Georgia, si bien, la primera evidencia documentada del instrumento se debe a la patente realizada en 1883 por W.H. Frost. Poco tiempo después, en 1902, llegaría la versión en forma de barco que conocemos en la actualidad, de la mano de otra patente a cargo de George D. Smith. Ya podéis imaginar, en pocos años los primeros kazoos hechos de metal comenzaban a proliferar popularizándose.
Os dejamos este simpático video protagonizado por kazoos, en el que ellos mismos van narrando su propia historia.
Madera, caña o bambú han sido algunos de los materiales utilizados para su fabricación. En la actualidad los encontramos principalmente de metal y plástico, con la característica forma de barco o submarino. Pero si sois amantes del coleccionismo existen en el mercado suficientes formas, tamaños y variedad como para iniciar una compilación de lo más variopinta.
En esencia, el Kazoo de metal está formado por tres piezas. Una base o tubo con tres orificios, el ancho para la entrada del aire, en el extremo opuesto uno más estrecho de salida y a un tercio del lado superior otro donde se sitúa la membrana, pieza clave, que va sujeta mediante una rosca. Para su mantenimiento se recomienda guardarlo limpio y seco después de su uso, así como sustituir la membrana en caso de que se estropee por la humedad o el desgaste.
No penséis que sólo se utiliza en las chirigotas de los carnavales. En las primeras décadas del siglo XX grupos de blues, jazz, vaudeville y bluegrass lo incorporaron a su repertorio, así como los Beatles en su canción “Lovely Rita” o Jimi Hendrix en “Crosstown Traffic”. Como podéis ver la versatilidad del kazoo se adapta a cualquier tipo de música, incluida la clásica, como demuestra el segmento que Leonard Bernstein le dedicó en su obra “Mass”.
En América existe un día dedicado a este instrumento, el 28 de enero, el llamado Kazoo national day, así como un Museo y Factoría en Beaufort, Carolina del Sur. En sus respectivas páginas podéis encontrar más información sobre este alegre instrumento.
Ya no hay excusa para que nosotros mismos, con la ayuda de un soporte de armónica o sujetándolo como un cigarrillo, podamos acompañarnos al tocar el ukelele. Es más, su fácil manejo permitirá participar en los conciertos a nuestros amigos, familiares y conocidos, porque no olvidéis que:
If You Can Hum… You Can Play.
Fuentes:
http://mentalfloss.com/article/29859/great-moments-kazoo-history
https://en.wikipedia.org/wiki/Kazoo
http://www.nationalkazooday.com/
Folleto informativo del Original Tin Kazoo de la marca Clarke.
Fotos:
- Colección Kazoos. De la web.
- Partes Kazoo. Foto original del Club Ukelele Valencia.
- Bernstein, de http://www.upi.com
- National Kazoo Day. De la propia página web.
Videos:
2 comentarios en “Instrumentos locos para acompañar el ukelele: EL KAZOO”